De sabios es escuchar
31.12.2010
Se da inicio al 2011, por lo que en estos últimos meses en los se concluyó el 2010, estuve evaluando la posibilidad de escribir esta nota y me encontré en la disyuntiva lógica que conlleva la responsabilidad de manejar ciertos pensamientos y conocimientos a la opinión pública, contemplando en ello dos alternativas; “transmitir” todo aquello que se ha publicitado y lo que pocos sabemos, a fin de dar así la posibilidad de que el lector se haga responsable de lo que conoce y puede fácilmente razonar, o “manejar” con cautela la información, de modo que inevitablemente se suavice el tono para no crear un colectivo humano negativo o lo que se llama una “masa critica”, que termine por plasmar más miedos en la materia… “La decisión, fue tomada”.
Evidente es el tiempo caótico y conflictivo que hoy comenzamos a vivir en Puebla, como claro está que existen suficientes advertencias sobre los peligros de la economía, el cambio climático, la inseguridad y el desempleo en el Estado y en México, que nos orilla a reflexionar y tomar en serio nuestro papel como sociedad… Sí, ¡como humanidad!.
Para tal efecto, es necesario tener claro que sin lugar a dudas, los poblanos y quienes cohabitamos en el estado de Puebla, hemos demostrado tener el potencial para crear nuestro presente y futuro, que tenemos la posibilidad y la responsabilidad de mejorar nuestra actitud individual y de grupo… Sí, proyectar nuestra forma de actuar en lo cotidiano hacia un macro que es la sociedad y con nuestros derechos constitucionales, desde la sociedad, influir en los poderes y la toma de decisiones para lograr el óptimo desarrollo de la entidad.
La sociedad poblana no puede continuar esperando que cambien las decisiones quienes ostentan el poder, no puede seguir aguardando la justicia divina si es que no hace nada por sí misma, porque nuestra responsabilidad “pasa por y obliga a”, modificar nuestra actitud individual y de grupo en nuestras familias, los diversos medios laborales y el entorno en el que nos desarrollamos… ¡Claro!, ello implica ejercer conscientemente nuestro derecho a opinión, a la critica propositiva e irrestrictamente, al voto en los sistemas políticos, exigiendo que se cumplan y respeten las decisiones que por derecho, demanda el pueblo dentro del bien común.
Sí, la sociedad hoy debe colaborar activamente con quienes deciden y con la sociedad misma, así como controlar correctamente con transparencia y rendición de cuentas, con una actitud positiva, constructiva y con adhesión desinteresada del uso del poder… Sí, con la responsabilidad y coparticipación responsable de cada uno, que incida en el contexto general de la sociedad poblana y la humanidad… ¿Cómo?, buscando siempre el conocimiento general y profundo de las cosas que acontecen en los barrios, las ciudades y el medio rural, recordando en cada paso e interacción, lo que dijo muchos siglos atrás el gran Maestro: “LA VERDAD LOS HARÁ LIBRES”.
Lo que la gente cuenta al respecto es que con la maquiavélica y violenta arremetida para finalizar la administración, aparentemente se percibe la victoria del mal poder… Por lo que respecta al vulgo, precisan el aforismo “como uno siembre, así también cosechará” y por su lado en el barrio se establece que, “cada acción tiene igual y opuesta reacción”, por lo que en este aspecto, con tanto compromiso incumplido, con tanta injusticia generada en el periodo y sobre todo, con tanto abuso del poder y deshonestidad en la administración, queda completa la referencia para el futuro cercano de “causa y efecto”… ¡Ya veremos dijo un ciego!.
Acerca de los momentos que se aproximan vertiginosamente para el cambio gubernamental, comentan en mi rancho, que deberá existir un muy interesante y honesto trabajo de periodistas y comunicadores en Puebla, una efectiva “reflexión final en torno al proceder gubernamental 2005-2011”, así como el papel político, social y económico con el que da “inicio la nueva administración poblana”, porque tan solo así, se dará un muy interesante estudio de estructuras, proyectos y evidencias del cercano futuro que viviremos en los próximos dos y seis años… Sí, la pauta a seguir para evitar lo conflictivo y la dinámica vertiginosa de sucesos estatales negativos que se venían dando y de los que por las condiciones que prevalecen en México y el mundo globalizador, ya están comenzando a incidir, con la constitución inminente de un gobierno nacional con intereses oscuros, el posible derrocamiento del panismo y la aparición en escena de un nuevo orden que será aceptado “sin ver”, por los poblanos y en general, por la gran parte de los mexican@s.
Todo esto que viviremos a diario puede hacer que reaccionemos de dos formas, la primera es que vayamos perdiendo paulatinamente la sensibilidad, y por ello, sumiéndonos así en la turbulencia de la impotencia, o la segunda, que asumamos nuestra responsabilidad como parte de la realidad y seamos un componente activo del posible cambio positivo… Sí, porque aunado a ello, hay que considerar que por la situación actual del mundo en lo económico, social, climático, geológico y político, es fácil pensar que estamos en un momento crítico y casi apocalíptico, en donde las clases más marginadas serán las que más sufran en todos los planos y que bajo los aforismos señalados y las consideraciones “causa-efecto”, incrementen las situaciones de inseguridad y hasta de terrorismo.
Sin ir en contra y menos satanizar de antemano a los nuevos dirigentes de gobierno, la prensa escrita, los medios de radio comunicación y televisivos y, en general la prensa libre, NO debe desvirtuar el verdadero conocimiento o la realidad, y mucho menos, crear falsas ideas, caminos erróneos y grandes confusiones en la sociedad, porque ello tan solo acentuará la mala percepción ciudadana que se tiene del gobierno y los gobernantes… Sí, es hora de trabajar todos por el bien común, atender y mejorar las zonas y poblaciones marginadas, no repetir los mismos errores del pasado y aportar el pequeño conocimiento al cual todo ciudadano tiene derecho ha acceder, de forma tal que permita tomar a cada uno, la responsabilidad que les corresponde, como parte de una humanidad que requiere pasar de la adolescencia a una madurez responsable.
Sí, porque el problema de la inseguridad pública que se vive en el país y las estrategias que se adoptaron para combatirla, así lo exige, y por ello, continua siendo objeto del debate y la preocupación de muchas mexicanas y mexicanos… Lo que la gente cuenta es que hace poco más de 16 años D’n. Luis Donaldo Colosio fue victimado en Lomas Taurinas, en medio de un escenario político muy álgido donde la disputa por el poder político y la posibilidad de la alternancia electoral a nivel federal era el contexto de fondo y de ahí que teme se repita la historia y se continúe descalificado la actuación del sistema público de los derechos humanos, así como la transparencia y la rendición de cuentas gubernamental.
La inseguridad no baja, las cifras de muertos a nivel nacional aumenta y no se ven claros los avances en la materia, por eso señalan en el barrio que “La verdad empírica” se impone frente al “discurso hueco y poco claro de los gobernantes y de los miembros de sus respectivos gabinetes”, así como de los políticos de hoy en día… Sí, señala la gente en Puebla, que en este 2011, la responsabilidad del Estado es y deberá ser, “hacer vigentes todos los derechos y no pretender que en aras de cumplir unos derechos, se violen otros”.
Ante la picardía y la mala fe ciudadana, se pregunta, ¿Notarias?, ¿Inversiones Públicas?, ¿Medio Ambiente?, ¿Z-MAMATO?, ¿Justicia?... ¡Fe y felicidad en el 2011!.
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