miércoles, 19 de mayo de 2010

Puebla 2010, esperanza de los poblanos

“Plebiscitos Puebla 2010”, ¿esperanza para los poblanos?.

ftraconis@gmail.com
18.05.2010

Ante la incertidumbre, la ciudadanía poblana por la inseguridad que vive el país, el bajo crecimiento económico, la desigualdad social, la falta de democracia y sobre todo, la falta de justicia y equidad, se pregunta cotidianamente, ¿hacia donde nos llevan nuestros gobernantes y las élites de poder?... ¿Qué hacer para mejorar el nivel que ocupa Puebla como entidad federativa y México como país en el mundo?.

Es un hecho que la situación económica mundial volvió a descomponer la situación no solamente en Puebla, sino en todo México, las bolsas de mercado cayeron; el nivel de desempleo continua subiendo; la pobreza continua incrementándose en su nivel extremo; los niveles educativos van a la baja, la protección del medio ambiente no encuentra eco en los gobiernos y la ciudadanía, y lo triste, los poblanos vemos que la actuación a nivel local, nacional y mundial parece estar en duda, al menos en el futuro cercano, por lo que la gente se pregunta, ¿no es buen momento para reflexionar sobre el fondo del asunto y hacer las consideraciones necesarias para decidir sobre nuestro futuro incierto y el de nuestros hijos?.

Los poblanos en general lo señalan tras bambalinas, los eruditos y pensantes lo manifiestan públicamente, pero al parecer el poder gubernamental, legislativo y judicial no escuchan o trasquiversan los deseos ciudadanos. No piensan conjuntamente sobre los principales problemas de una Puebla como la que hoy tenemos, con falta de competitividad ante un avasallador mercado nacional y mundial, una desleal competencia entre los actores económicos locales y nacionales, la presencia de un gobierno menos facilitador de inversiones para generar el crecimiento económico y por ende, generar empleos; condiciones que sin lugar a dudas, no permiten resolver el grave problema que existe en la desigualdad social.

Baluartes del Bicentenario y el Centenario. Más que la coyuntura actual que indudablemente hay que atenderla con madurez, creo yo que el camino andado después de haberse concluido la primera etapa de la Revolución Mexicana (1910-1916), nuestros gobernantes al paso sexenal no han sabido entender y mucho menos construir la relación que existe entre Leyes-Justicia-Pueblo, País-Desarrollo-Pueblo, Derechos-Obligaciones-Pueblo-Gobierno y Desarrollo Sustentable-País-Pueblo; ya que a la fecha, no guardan y al parecer ya no recuerdan después de los 200 y 100 años de las epopeyas históricas, el significado y principios con los que se evocaron la Independencia y nuestra Revolución, es decir, el objetivo de una transformación profunda de la realidad política y social en la cual debería intervenir como actor principal el pueblo, o una gran parte de él.

Bien cita la gente en el barrio, lo importante no es que el gobierno persista en una política llena de programas para mantener y comprar a los pobres, sino más bien, se requiere de políticas y acciones que los saque del nivel de pobreza en la que se encuentra y adecue el aprovechamiento equitativo de las riquezas que la entidad ofrece, logrando con ello un desarrollo geográfico, regional, local y humano sustentable.
Se habla hoy en día en los medios de comunicación masiva y en las campañas electoreras, que como punto esencial dentro de la política económica de Puebla y del México actual, es necesario obtener un verdadera reforma fiscal, cuando realmente la gente no le ve la cuadratura del círculo, para eliminar o al menos minimizar los privilegios fiscales de los grandes corporativos y grupos élites. Asimismo, no se encuentra la formula para que Gobierno-Legisladores (nacional y local), operen en conjunto a favor del mandato del pueblo, y a efecto de generar la oportunidad de equilibrar la balanza en la generación de riqueza, explotar adecuadamente los recursos naturales, y en el caso mexicano, el petróleo y las fuentes potenciales (hídricas principalmente) para generar electricidad, entre otros rubros secundarios.

La ineficiencia y corrupción administrativa de los gobiernos (estatal y municipal) y su falta de transparencia y rendición de cuentas, aunado a los monopolios y contubernios Estado-Iniciativa privada, sin menos cabo a otra verdad, son el escenario que la gente vive cotidianamente como sustento ejemplo de la improductividad e inhibición de la competitividad del Estado y en general del país, más que de la generación de riqueza o al menos, abaratamiento de precios para no ser afectados como consumidores.
Lo que la gente cuenta es que ve una Puebla y un México en retroceso productivo, que día con día y a final de cuentas, no se crece porque lo importante para gobernantes y legisladores NO es la prioridad el investigación tecnológica, una industria propia, eficiente y modernizada, sí, empresas y sectores verdaderamente competitivos. Por ello se pregunta, ¿A favor de que o de quien trabajan una vez electos por el pueblo?. Si algo necesita el Estado y el país, es ser productivo, tener certeza jurídica para la inversión productiva y la generación de empleos con calidad.

¿De que han servido la diversidad de órganos institucionales reguladores creados para controlar la corrupción, la buena marcha de programas sociales y públicos, para vigilar y controlar las prácticas monopólicas; la impartición de justicia, como lo establece la carta magna y la correspondiente constitución del Estado?... ¿Es que no conocen que son prácticas en los países avanzados desde mediados del Siglo XX e inicio de este XXI?.
¿Verdaderamente el Estado ofrece la certeza jurídica para que todo poblano y asentado en Puebla se sienta seguro en el camino de las garantías constitucionales?, ¿Para que las administraciones públicas no eliminan los vicios mostrados cada día más y más, limitando el desarrollo sustentable del Estado y el respectivo humano?, o de plano hay que estructurar un órgano ciudadano elegido directamente por el pueblo, con autonomía y no dependiente del gobierno en turno, para que se enfoque realmente a beneficiar a la gente y no solamente a los políticos, a los grupos de élite de gobierno y económico de la entidad.

En cuanto al gremio sindical envuelto en el sector productivo y los sindicatos públicos, definitivamente expresa la gente que la tienen secuestrada en pensamiento, que ello es en complicidad con los legisladores, empresarios y las autoridades, sí, que también han perdido el rumbo revolucionario y los de su creación, ¡el derecho laboral y la provisión de garantías obreras!, volviéndose como el gobierno, incesantemente con asociaciones familiares, de compadrazgo y de intereses de grupo, y lo grave, que en complicidad del gobierno, han ido estructurando grandes pirámides de improductividad que obstaculizan hoy en día, los cambios necesarios para que Puebla sea más competitiva y productiva, así como, que se han vuelto realmente grandes obstáculos del desarrollo del sector en donde están… Prueba estatal de ello son los grandes monopolios creados por las centrales obreras, el sector educación, PEMEX y CFE, por no citar a todos, los envueltos en la partidocracia mexicana.

Referente a lo partidos políticos, sin lugar a duda "EL TIEMPO" es el tesoro más valioso que tienenen porque a estas alturas, “Es Limitado”. En política, señalan los grandes politólogos, “es muy importante que los que participan se actualice día a día”… que nadie crea que ya ganó, ni nadie se sienta que ya perdió… Sobre todo, sí “¡aun sobra un poquito de tiempo para las elecciones!” . Obviamente la gente piensa que de algún modo los partidos políticos en Puebla y sus dirigencia en México, tienen la concesión de la expresión electoral mientras no existan (“o lo permitan”), las candidaturas independientes. El sentir generalizado, es que el régimen político no debe ser exactamente puramente del gobernador y los grupos élites de poder, sino que deben tener ingredientes ciudadanos bien regulados, a fin de evitar mayores degeneraciones democráticas.
Lo que también la gente cuenta es que el dinero sucio no vaya a entrar con los candidatos oscuros, por llamarlos de alguna manera, que el dinero limpio entregado por la federación y los particulares, también sea visto de una manera transparente por los votantes, porque a pesar del IEE, tampoco hay rendición de cuentas en eso de los partidos. No obstante que por ley, se supone que los partidos políticos han cedido su secreto bancario, fiduciario y fiscal. Reto muy puntual en el escenario del 4 de julio y para los futuros comicios del 2012.
¿En dónde están nuestras oportunidades? ¿A dónde hay que mirar? ¿Cuál es nuestro lugar como ciudadanos?, son las preguntas que se hace la gente del barrio, ¿Cómo ser activos?, ¿Como hacer planteamientos mucho más audaces y mucho más visionarios donde se incluya las necesidades de migración, energía, infraestructura, normas o estándares de convergencia, seguridad, educación?, Es decir, lo que realmente le puede convenir a Puebla y a los poblanos, para tomar medidas que no permita más que se lleven lo que son sus ingresos para el sustento y desarrollo familiar.
Aprovechando estos comicios del 2010, ¿se podría firmar un convenio con los candidatos para que en el futuro cercano, se vuelvan a sentar en la mesa del pueblo, al nuevo gobernador, políticos, legisladores y al ejecutivo poblano; para negociar estos temas que parecen imposibles, pero que en una real democracia, nos podría acercar nuevamente a los principios Revolucionarios y Democráticos deseados?.
Creo que como esta, es la única alternativa para emitir un mensaje de esta naturaleza, para comprendernos mejor unos a los otros y ellos a la intención ciudadana. Simplemente ya no se quiere más violencia, narcotráfico o delincuencia organizada, llanamente se quiere que estos temas se combatan corresponsablemente, que la visión de nuestro Estado sea el de un horizonte mucho más generoso; asumiendo compromisos de carácter económico, de carácter civil y social como lo son los derechos humanos; ya no se quiere más imposición, y mucho menos que nuestra vida sea hecha de acuerdo a cada gobierno en turno… Pensar que después del 4 de julio de 2010, hay muchas generaciones que esperan buenos resultados de esta nuestra generación.
Lo que la gente cuenta es que es la hora de ir hacia una visión y una protección social más universal y de menor asistencialismo puro, que lo que busca esto último señalado, es no resolver el problema de fondo, sí, ¡la pobreza!. De igual forma manifiesta que es necesario incluir en programas gubernamentales (de campaña), más solidez en seguro médico y de trabajo; seguro de accidentes y de desempleo; mayor atención y menos marginación para pensión y jubilación; y en general, todo lo atado al bien común como lo es, menos impuestos y más recaudación; acabar con los privilegios; definir y proteger la canasta básica de alimentos y el cuadro básico de medicinas; recordemos que la ruta del seguro popular, aunque es una noble idea, lo único que generará, será el financiamiento de la informalidad.
Lo que la gente pide es que recuerde el gobierno y los políticos interactuantes de estos plebiscitos, que hoy se está jugando con el destino de todos los poblanos, y serán la base para los mexicanos en el 2012; que dejen de ser gobierno y partido de cuates, compadres, cuotas y de ocurrencias temporaleras; Que hagamos propuestas viables para modernizándonos institucionalmente, ya que es bien conocido, que las instituciones son las que hacen los buenos gobiernos.

La última y nos vamos. Hacer un alto en el camino y replantear la estrategia, es la única forma inteligente para dar resultados, enfrentar los retos y la diversidad y complejidad de las actuaciones, de la conducta, de poder obtener evaluaciones correctas para corregir el grave desorden en el que nos encontramos.

El vaticinio para las elecciones 2010. La Puebla tradicional, ejercerá su voto por su partido afín y no por candidatos. La imposición de Estado es un hecho no escrito. Como se ve el día, el PRI tiene mayor oportunidad, ya que la coalición de oposición, tal y como va, recuperará tan solo algunos municipios y probablemente nuevas curules en el congreso local… ¿ Alguien le apuesta a la violencia y la impunidad en este proceso electoral?.

“Existen derrotas, pero nadie está a salvo de ellas. Por eso es mejor perder algunos combates en la lucha por nuestros sueños, que ser derrotados sin siquiera saber por qué se está luchando."… P. Coelho

El color y actitud del gato

“La importancia del color y la actitud del gato”.

ftraconis@censura.org.mx
16.05.2010

Es increíble e inaudito que ante la incapacidad de gobernar a través de la racionalidad política y administrativa, la congruencia y la honestidad, la justicia y la equidad, ahora se tenga que recurrir en los plebiscitos de Puebla 2010, a un discurso mesiánico y fundamentalista para justificar el fracaso de los proyectos incumplidos en el Estado. El único discurso observado hasta ahora, es la demagogia como artículo de fe, lo que demuestra el grado de descomposición social al que estamos llegando los poblanos en la entidad… No cabe duda, urge se realicen las confrontaciones públicas (debates), antes de que nos alcance el destino… ¡El mundial de futbol!.
Hoy hasta piden a Dios que los ilumine para hacer un buen gobierno, para trabajar en pro de los pobres, lo que sin duda hasta ahora el recurso demuestra políticamente lo patético de un candidato a gobernante o legislador quien soñado urgido de un acto divino, busca solucionar yerros totalmente humanos.
El fracaso de las costosas campañas mediáticas de difamación para doblegar al oponente, para ganar la preferencia electorera y el sobrado contubernio de algunos medios que como testaferros minimizan y cuestionan el posicionamiento de uno u otro partido contendiente, da lastima, hastío y desilusión ciudadana, ya que mientras ellas transcurren, la sociedad se hunde más en el desempleo, la pobreza extrema, la violencia, la migración a pesar del riesgo y la discriminación, la inseguridad y el narcotráfico a causa de salarios de hambre y temor.
Lo que los candidatos y sus partidos deben pensar, es el como reformar el actual modelo de desarrollo económico, social y humano integral de Puebla, por estar actualmente disfuncional e inequitativo a las necesidades de la sociedad poblana. Aunque no obstante ello, también es de reconocer que vivimos en una sociedad muy curiosa y poco participativa, se hace llamar democrática por “hacer ó poder tener elecciones democráticas”, es decir, “libres”; se dice plural e incluyente, tan sólo por el irrestricto respeto a la “libertad de expresión y manifestación de ideas”, aunque también se dice en contraposición, que es por que vivimos en un esquema diseñado fuera de los tiempos presidencialistas, sí, el de los tiempos de la “dictadura perfecta” en manos del PRI (Estado) y el PAN (Federalismo), dejando de lado el hecho de no reconocer cuando un candidato o partido pierde frente a otro y quien gana, debe gobernar para todos por igual… porque a final de cuentas, es el electorado quien les da la oportunidad para servir a la sociedad, y no así, para servirse.
La clase política es mala perdedora. La cultura política en la que vivimos hoy en día, es la de ganar como sea, sobre quien sea y costando lo que sea, sin importar lo que se dañe, que en este caso, hablo de la confianza y esperanza vertida por los ciudadanos. La percepción ciudadana en cuanto al caso de perder, es que siempre los políticos responsables buscan elegir un culpable (que no son ellos), y evitan al máximo admitir públicamente una derrota o error cometido (cínicos ó sin huevs), y fundamentalmente, no aceptan su proceder maquiavélico y mediático con el que actuaron frente a la sociedad… Sí, la sociedad que madura día con día en lo político y el acontecer de respuesta gubernamental.
En este sentido es incongruente también que en los mismos gremios partidistas existe el sectarismo y el linchamiento entre quienes “a pesar de la denominada unidad” y los que no lo hicieron en ese principio, la parte activa asume una postura intransigente de linchamiento que provoca la delicia del gobierno en el poder, cuando surte efecto el término clásico ¡divide y vencerás!.
También es interesante observar que ante la particularidad de estos comicios del 4 de julio, y que involucra las perspectivas del horizonte nacional 2012, la sociedad actual al igual que en los tiempos de la Revolución Mexicana, también señala que es pueblo y que solamente con la unidad, creatividad y sinceridad, se llegará lejos.
La condición ruinosa en la que se encuentra Puebla y los poblanos, se debe a la pobreza y miopía de sus elites en el poder; y que conste que no hablo de su pobreza económica, sino más bien, de la cortedad de miras y de visiones colectivas de largo alcance. Sí, en Puebla, así como en una buena parte de México, quienes gobiernan, los políticos y los legisladores están envueltos en una búsqueda egoísta, sí, en la aspiración de acumular grandes riquezas y poder rápidamente, sin prestarle atención a cuestiones éticas o humanas, e intentan con su actuar cotidiano, que alguien más cargue con las consecuencias negativas de tal manera de proceder.
Ciertamente que tenemos que culparlos de todos nuestros males como Estado y como país, por ser los de mayor responsabilidad, pero también cabe decir, que en esta responsabilidad no podemos dejar de pensar o eximir a los empresarios, a los líderes obreros y campesinos, al poder judicial, a los responsables de la seguridad pública, entre otros.
¿Quién primero, el huevo o la gallina?. La pregunta que se hace la gente parece ociosa, pero es una realidad que fuese quien fuese, se requiere romper el círculo vicioso, inhibido por el egoísmo y la complicidad, aunque tal rompimiento implique afectar intereses primordiales personales o de grupo. La caída de inversión productiva y por ende, del empleo y la competitividad, dígase lo que se diga, se debe a fundamentalmente a la falta de certidumbre jurídica, exceso de corrupción, y abuso de ciertos grupos y élites en el poder.
Ejemplos diversos los tenemos en la entidad y a nivel nacional, en cuanto al logró de elevar fortunas gracias al apoyo del gobernante en turno (compromisos adquiridos en campaña) y sus respectivas instituciones administrativas de su gobierno (corrupción directa con grupos afines), situación que no retribuye a la sociedad nada más que perjuicios, y más bien, vuelve la función una agresiva política monopólica, so pesada bajo el erario federal o las finanzas públicas y a favor de la riqueza personal, imagen y adquisición de mas poder.
Caso extremo del padecimiento lo vivimos cuando el reinado presidencial era totalitario, pero desde el año 2000, el reinado gubernamental tirano, es lo que nos resta. En este sentido existe la razón en cuanto a las referencias que se hacen con respecto a que el capital y el poder no tienen nacionalidad. De ahí la pregunta incesante del poblano común, “como mexicanos parecemos apátridas y tal parece que carecemos de árbol genealógico… De ahí la gran importancia de ejercer el derecho a votar y ser votado. Sí, ejercitar el derecho constitucional este 4 de julio… Lo contrario, será como hasta ahora, ¡mejor callar y no criticar!.

Retomando el caso de los empresarios poblanos, carecen de solidaridad para generar ciencia y tecnología, así como más vinculación y apoyo a la educación y formación de la juventud poblana. Puebla aún, es un Estado de filantropía raquítica, a diferencia de entidades federativas progresistas como lo es Nuevo León. Sí, algunos empresarios ejercen un peso excesivo que ha llevado al sistema gubernamental y político a extremos muy peligrosos para la armonía pública y la continuidad del desarrollo productivo de la entidad.

“No importa de que color sea el gato, siempre y cuando cace ratones”… Deng Xiao Ping